Anónimo
- Drey
- 10 oct
- 2 Min. de lectura
Realmente no sé si leerás esto o si te importará, pero creas o no... me está costando mucho soltarte, no entiendo la razón por la cual no logro dejarte ir. Tus acciones son confusas, dices algo pero al rato simplemente actúas diferente, quisiera poder comprender que tanto quieres o deseas, tengo mil preguntas sin respuesta, mil teorías sobre todo esto, pero ninguna de esas teorías ayuda a comprender nada. Cada escenario posible es una suposición en base a tus acciones, si tan solo me buscaras y dijeras todo, si tan solo hubieras actuado en base a las mil palabras que dijiste, si tan solo hubieras aceptado tu parte y yo la mía, donde ambas partes tuvimos culpa, donde ambas partes colaboramos para este final. No hubo una última conversación, un último acuerdo, solo me soltaste de la manera más fácil posible, donde me dejaste en claro que no te importe realmente, donde creí que lo nuestro no significó nada, donde creí que lo nuestro no tuvo una razón válida de ser, solo mostraste lo que quisiste y te fuiste, dejándome con todo el amor en las manos, culpándome de todo y yéndote con excusas banales y culpándome solo a mi. No me diste la oportunidad de pedir al menos una amistad, ni tampoco me diste la oportunidad de una última conversación. Tantas veces que te pedí saber que sentías por mí y eso jamás lo supe, tantas veces que te pedí al menos un poco de respeto por mis necesidades y aún así tampoco te importó, donde tus necesidades eran más importantes que las mías, donde me recalcabas que yo no era tu prioridad, donde me recalcabas tantas cosas, donde no hubo respeto por las cosas que me hacían sentir mal, donde solo huiste en vez de enfrentar, donde tantas de tus acciones crearon en mí reacciones que luego hicieron que te fueras. Cada acción mía fue una consecuencia de una acción tuya, no habría pasado todo lo que pasó si tan solo te hubieras puesto una vez en mis zapatos y entender que me hacías daño con tus acciones y palabras, donde me conformé tanto con tal de no perderte y aún así pasó. Lo peor de todo es que si volvieras te diría que sí de nuevo, que a pesar de todo sigo sintiendo cosas por ti, sigo queriéndote, sigo recordando las cosas buenas que hubo, donde a pesar de todo, sigo extrañándote y queriéndote de la manera más silenciosa posible. Todo esto es un desahogo, no lo tomes personal, solo necesitaba dejar en claro que aún te quiero, que a pesar de todo siempre te diría que sí, que me sigues importando, pero realmente ya no sé si estás al lado de alguien que te de cosas mejores que yo. Me hiciste un favor al dejarme ir, porque en el fondo sabía que yo nunca habría podido dejarte ir a ti. Hasta ahora simplemente adiós, suerte en todo y que seas feliz.


Comentarios